QATAR 2022/SELECCIÓN ARGENTINA
Con un Messi en modo Diego, la Argentina derroto a Australia 2 a 1 y clasifico a Cuartos de Final.
Una verdadera locura se vivió en el estadio Ahmad Bin Ali, donde cerca de cuarenta mil argentinos vibraron y alentaron con la selección; no solo los goles de Lionel y de Julián Álvarez, sino el rechazo de Lisandro Martínez y la atajada en modo Fillol de Dibu Martínez, transformando una noche que pintaba para tranquila, en una épica.
Es que de arranca nomas, la selección controlo el partido, a puro toque y transiciones, tratando de que la pelota se mueva y, sobre todo, que los australianos corriesen detrás de ella. En cinco minutos nos dimos cuenta como iba a ser el partido: Argentina con la posesión, intentando encontrar el pase justo para romper esa verdadera barrera de coral australiana, que no se saldría de su libreto, esperando el error rival o los pelotazos a los grandotes, a ver si encontraban en esas, la posibilidad de convertir.
La tenencia se hizo larga pero no encontraba la albiceleste el espacio justo para abrir el marcador. Finalmente, al minuto 35, de un pase de Messi con posterior devolución de Otamendi, a quien le quedo larga, fue a caer a los pies del astro, que la acomodo con un toque suave, cual golpe de pool, que paso de caño a una defense que miraba atónita como la pelota ingresaba suave a la red. Otro partido nacía y ahora los espacios podrían aparecer.
El complemento tuvo los primeros cambios tácticos de Scaloni; Lisandro Martínez por Papu, acomodaría mejor a la defensa y dejaría a Julián jugando bien de nueve movedizo, presionando alto, en su versión River platense, lo que lo llevaría a pescar una pelota que convertiría en gol. 2 a 0 y a cobrar, mas cambios de ambos lados y esperando que llegue un tercero que Lautaro no pudo convertir en algunas y Messi y Taglia en otras. Descuento canguro en una pelota perdida que se desvió en Enzo y diez minutos finales para el sufrimiento y la locura, pero donde vimos a Messi jugar de “10” clásico, teniendo la bola y a un Dibu, saliendo a achicar a lo Pato para cerrar una victoria, que había tenido un rato antes la salvada providencial de Lisandro, arrojándose como un espartano en el área, para defenderla a muerte.
Pasamos bien, corrimos, metimos, jugamos y sufrimos. Holanda, vamos por vos el viernes, ahora a descansar y festejar. Ilusionarnos… Vale la pena…
Por Guillermo Boris
