Elena Romero Vargas

Si la excusa que siempre pones para llevar una vida activa es la
falta de tiempo, siento decirte que eso se ha acabado. Existen muchas formas de ejercitarse sin salir de casa, y lo mejor, puedes conseguir efectos similares a los que te pueden dar horas de gimnasio. Para las que buscan perder algunos kilos y tonificarse, esta rutina de veinte minutos es la solución que necesitan.

Los
entrenamientos de HIIT o alta intensidad no requieren mucho tiempo y te aseguran resultados efectivos, tan solo hace falta que pongas de tu parte compromiso y mucha fuerza de voluntad para ser constante en la tarea. Si realizas esta rutina tres veces por semana y lo complementas con una vida activa y una alimentación saludable puedes lograr tu objetivo sin invertir tiempo y dinero en un gimnasio.

Beneficios de la rutina de alta intensidad

Este entrenamiento se compone de una serie de ejercicios que se repiten cada uno durante 40 segundos con 20 segundos de descanso entre cada uno. Al ser cortos e intensos, su efectividad es muy alta. Ayudan a acelerar el metabolismo durante la actividad y también en el tiempo de reposo gracias al efecto afterburn, pues debido a esta intensidad durante un periodo de tiempo posterior el cuerpo sigue quemando grasas aunque no esté ejercitándose.

La pérdida de calorías no es el único beneficio que aporta. Como tiene una diversidad muy amplia de trabajo, puedes enfocarte en partes del cuerpo concretas y
tonificar los músculos de esa zona. Al fortalecer los músculos el cuerpo genera más glucocenos y acumula más agua, lo que hace que aumenten las reservas de energía y tus músculos se hagan más fuertes.

Esta rutina de ejercicios aporta beneficios físicos y mentales/UNSPLASH

El entrenamiento de alta intensidad no solo aporta beneficios corporales. Tu salud mental y bienestar general también se verán visiblemente reforzados cuando hagas de esto parte de tu vida. Ayuda a reducir el estrés y a calmar la ansiedad, y se produce una liberación de endorfinas, la hormona de la felicidad, por lo que te sentirás mucho mejor contigo misma si combates el sedentarismo.

¿Qué ejercicios combinan con este entrenamiento?

La oferta de propuestas es muy amplia. Según el objetivo, la zona que quieras trabajar o tu condición física inicial puedes decantarte por uno u otro. Recuerda que la clave para que funcionen, además de una correcta ejecución, está en complementarlo con una vida sana y un cuidado general de tu salud en la alimentación y en el estilo de vida más allá del momento de hacer deporte.

Uno de los ejercicios más efectivos y populares en los entrenamientos de alta intensidad son los burpees. Este ejercicio combina saltos con flexiones, y si quieres hacerlo aún más intenso, con sentadillas. Aunque es muy
exigente y al principio puede que te cueste trabajarlo ejecutarlo, con el tiempo y la práctica notarás sus efectos y puede que, incluso, le llegues a coger el gusto.

La plancha es otra de las joyas de la corona de este entrenamiento. Consiste en colocarte boca abajo y apoyar el peso de tu cuerpo en los antebrazos y en la punta de los pies. Tan solo necesitas el peso de tu cuerpo y mucha resistencia para aguantar entre 30 y 40 segundos en esta posición. Puedes combinarlo con flexiones si, además de trabajar el abdomen, quieres ejercitar en el proceso tus brazos.

La sentadilla es uno de los ejercicios estrellas del HIIT/UNSPLASH

Si quieres ir un paso más allá, prueba con el ejercicio del escalador. Parte de esta posición base y lleva la rodilla hasta el codo. Repite alternando las piernas durante el tiempo estipulado. Puede que nada más comenzar hagas menos repeticiones de las que quieres, pero todo es cuestión de ir acondicionando el cuerpo para que en cuestión de semanas tengas dominada la velocidad que deseas.

En el podio de los ejercicios de HIIT está también las sentadillas, un ejercicio muy popular y perfecto para reforzar las piernas y los glúteos. Una versión que va un paso más allá son las sentadillas de sumo. Con las piernas abiertas 180º y la punta de los pies mirando hacia afuera, sube y baja apretando el abdomen durante 40 segundos, sin parar aunque al principio te cueste trabajo.

Antes de aventurarte a probar este método, asegúrate de adaptarlo a tu condición física y, si es necesario, consultar con un experto cómo debe enfocarlo. Aunque la perseverancia es fundamental, no quieras darlo todo desde el primer momento si no estás acostumbrada a este estilo de vida. Es mejor ir poco a poco y con constancia para
evitar lesiones y lograr los resultados de forma siempre saludable.