Ana Pizarro

Tomar una infusión se ha convertido en todo un ritual. Hay quien las utiliza como método para desconectar de la rutina y la vorágine del día a día. Otros recurren a ellas en cuanto sienten molestias estomacales, como remedio para calmar el malestar. Estas bebidas, siempre preparadas a base de agua con hierbas, flores o frutas, no solo son perfectas para reconfortarnos, sino que ofrecen beneficios respaldados por siglos de uso tradicional y ciencia moderna.

Está comprobado que incorporar según qué infusiones a la rutina diaria puede mejorar la salud, ayudar a hidratarnos y, además, proporcionarnos momentos de calma y de desconexión.

Casi todas son populares por sus propiedades antioxidantes, digestivas y relajantes, pero existe una menos conocida que otras como la manzanilla o la tila que, además, nos ayuda a desintoxicarnos y a proteger el sistema inmune. Hablamos del té de romero, una infusión barata, rica y con muchas propiedades. Esta infusión, derivada de la planta mediterránea del romero, es perfecta para cualquier estación del año.

Tres beneficios poco conocidos del té de romero

Aunque estemos acostumbrados a utilizar el romero como especia en la cocina, su versión en té tiene propiedades poco conocidas que merece la pena destacar.

El té de romero es mucho más que una bebida caliente con aroma a hierbas; es un aliado para la salud que puede transformar tu bienestar, como también lo es la infusión de cardo mariano de la que ya te hablamos. Aunque esta planta se usa frecuentemente como condimento en la cocina, su versión en infusión tiene propiedades poco conocidas que vale la pena destacar:

Ayuda a mejorar la memoria y la concentración: El romero contiene compuestos como el ácido carnósico, que estimulan la actividad cerebral y mejoran la memoria. Investigaciones sugieren que el consumo regular de té de romero puede ser un aliado en la prevención de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.

Propiedades antiinflamatorias y digestivas: Esta infusión es conocida por sus efectos calmantes en el sistema digestivo. Ayuda a aliviar problemas como la hinchazón, la acidez o los cólicos. Además, el romero tiene compuestos antiinflamatorios que pueden reducir dolores articulares y musculares, convirtiéndolo en un remedio natural para el malestar corporal.

Refuerzo del sistema inmunológico: Rico en antioxidantes, el té de romero ayuda a combatir los radicales libres y fortalece las defensas del cuerpo. Esto lo convierte en una opción ideal para protegerte contra resfriados y otras enfermedades comunes, especialmente en las estaciones frías.

Paso a paso para hacer té de romero en casa

Aunque es cierto que se puede encontrar en bolsitas ya preparadas en muchos supermercados, preparar una infusión de romero en casa, con ingredientes naturales, siempre será mejor opción.

Para conseguirla, bastará con que hiervas una taza de agua en una olla o tetera y añadas una cucharadita de hojas de romero fresco o seco, dejando reposar de 5 a 7 minutos, ya con el fuego apagado.

Después, cuela la infusión y sírvela añadiendo, si te gusta, unas gotas de limón o un poquito de miel para darle un sabor intenso y diferente.