Era el final del partido y Boca se llevaba una tan ajustada como dura victoria frente a Defensa y Justicia. El elenco de Florencio Varela jugó la pelota al área desde un lateral y Marcos Rojo cometió una falla insólita para un defensor de su talla; Adonis Frías intentó aguantar y el marcador lo tomó primero de arriba para luego derribarlo de una patada a la altura del tobillo. Todo esto, dentro de la zona donde se sanciona penal.

Frías naturalmente cayó al pasto luego del golpe de Rojo pero el árbitro Fernando Echenique dejó seguir, a pesar del intenso reclamo de todo el equipo visitante. Ya se habían cumplido los cuatro minutos adicionados por lo que el acto siguiente determinó el final del encuentro y los tres puntos para Boca.