Sí, ya sabemos que la manzanilla es una de las infusiones clásicas por antonomasia para después de comer. Conocida por sus propiedades digestivas y relajantes es perfecta también para antes de ir a dormir.
No obstante, más allá de ella existe un mundo de sabores y beneficios que se pueden extraer de otras infusiones igual de ricas e igual de naturales. Y es que, las infusiones antioxidantes son una excelente opción para completar cualquier comida, ya que ayudan a neutralizar los radicales libres y proteger nuestras células del daño oxidativo.
Por qué hay que tomar antioxidantes y a qué edad empezar
Los radicales libres son uno de los peligros a los que todos nos enfrentamos en lo que a mantener la salud se trata. Estos radicales son moléculas inestables que se generan en nuestro cuerpo y que se incrementan como causa del estrés
, de la contaminación e, incluso, de una mala alimentación. Radicales libres que nos llevan a sufrir daño oxidativo en las células y que puede derivar en enfermedades crónicas y graves como pueden ser algunos tipos de cáncer, enfermedades cardiacas e, incluso Alzheimer.
Por suerte, podemos protegernos de esos radicales libres y una de las maneras es teniendo en cuenta los antioxidantes en nuestro día a día. Estas sustancias ayudan a nuestras células a protegerse del daño causado por ellos.
Infusiones antioxidantes más allá de la manzanilla
Como decíamos al principio, la manzanilla es una de las infusiones más conocidas por su poder antioxidante
, además de por la ventaja que presenta para reducir la pesadez de la digestión. Por ello es la bebida que está en casa de prácticamente cualquier español medio que se precie. Aunque es bastante buena y reporta muchos beneficios sobre la salud, no es la única infusión antioxidante a la que podemos recurrir justo después de comer.
Existen otras que, además de por su sabor y su aroma, nos brindan una pausa para relajarnos y disfrutar del momento presente. Vamos a ver qué otras infusiones con antioxidantes pueden cuidar de tu salud.
