
La investigación por el origen de los millonarios fondos que hicieron posible la construcción del “Portal del Cielo”, el auditorio evangélico más grande del país, sumó un nuevo capítulo. El arquitecto Jeffrey Berk, titular del estudio que diseñó y dirigió técnicamente la obra, declaró como testigo ante la Justicia Federal de Resistencia y aseguró que los pagos siempre se canalizaron a través de la Fundación Cielos Abiertos, creada por la iglesia del pastor Jorge Ledesma.
Berk relató que su estudio asumió el proyecto en 2013, tras la firma de un contrato inicial por 1,3 millones de pesos (equivalentes a casi 300 mil dólares en aquel momento), abonados en ocho cuotas bancarias. En etapas posteriores, aclaró, sus honorarios fueron calculados como un porcentaje del avance de obra, mientras que la fundación quedaba a cargo de la compra de materiales y la contratación de empresas constructoras.
El rol del estudio fue auditar costos y certificar volúmenes ejecutados, pero la fundación era la que manejaba directamente los pagos, explicó.
Avances parciales y modificaciones
Aunque el auditorio fue inaugurado en 2024 con un imponente acto religioso, Berk advirtió que la construcción sigue inconclusa. Estimó que el avance global se ubica entre un 40% y un 60%, y señaló que la sala principal apenas llega a un 80% de finalización. Faltan cielorrasos, gradas y revestimientos, y en el último tramo la propia fundación ejecutó cambios por su cuenta.
El arquitecto describió esa etapa como un “hágalo usted mismo” y mencionó, entre las modificaciones, la incorporación de un bloque cuadrado en la fachada que no formaba parte de los planos originales.
El Portal del Cielo, con capacidad para más de 15.000 personas sentadas, es considerado el estadio cerrado evangélico más grande de Argentina. Aunque no existe un presupuesto oficial consolidado, fuentes de la investigación estiman que el costo de la obra supera los 50 millones de dólares.
Las sospechas recaen sobre el pastor Ledesma, conocido por sus declaraciones sobre supuestos “milagros financieros”, en los que decía transformar pesos en dólares. La jueza federal Zunilda Niremperger ya autorizó el levantamiento del secreto fiscal, bancario y financiero de Ledesma, de la fundación y de empresas vinculadas, a pedido del fiscal Patricio Sabadini.
Lo que viene en la causa
De momento no hay imputaciones formales, aunque los investigadores advierten que la pesquisa enfrenta un obstáculo central: gran parte de los ingresos de la iglesia provienen de donaciones en efectivo de origen anónimo, lo que dificulta rastrear la ruta del dinero.
En paralelo, se espera que la Unidad de Información Financiera (UIF) y la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) aporten informes clave para reconstruir el flujo de fondos.