Llega el ecuador del mes de agosto y con él, la fecha más esperada por todos aquellos que nos hemos quedado trabajando, o disfrutando del verano en la capital. Porque el puente del mes más vacacional del año es ese momento en el que la ciudad se vacía, la tranquilidad llega a las calles y los rooftops se convierten en lugares perfectos para disfrutar del sosiego estival. Y hay uno especialmente, íntimo, delicioso y con un servicio excelente, que ha conquistado nuestros corazones y nuestros paladares.
Porque el rooftop del Relais & Chateaux Heritage Madrid Hotel, o lo que es lo mismo, la terraza del restaurante Haroma, es el lugar perfecto para disfrutar de la quietud que el puente de la Asunción gracias a su inigualable emplazamiento, su exquisita propuesta gastronómica y su estética afrancesada. Una experiencia culinaria completa en la séptima planta de un hotel que, este verano, se ha propuesto deleitarnos con la mejor cocina de autor en un ambiente relajado y cuidado al detalle.
Situado en el número 43 de la calle Diego de León, en el barrio de Salamanca, el chef Mario Sandoval firma en Haroma una carta estival llena de encanto, creaciones únicas que, junto al servicio del equipo del restaurante y su inigualable entorno, convierten la velada en un encuentro inolvidable.
Una carta para saborear el verano
Pensada para compartir, saborear sin prisas y dejarse sorprender, la carta que el cocineron madrileño ha creado para la temporada estival de Haroma, combina con acierto creatividad, armonía y orígenes, apostando por las mejores materias primas y recuperando los sabores tradicionales a través de las técnicas más vanguardistas. Una propuesta gastronómica sofisticada y exquisita, con elaboraciones pensadas para degustar la buena cocina adaptándose a los rigores del verano.

Tiradito de pez limón con huevas de tobiko y maíz crujiente del restaurante Haroma, el rooftop ideal de este verano.
AFL
Así, entre los entrantes de Haroma, ideales para compartir, podemos encontrar ostras con jalapeños y fruta de la pasión, unos exquisitos buñuelos de bacalao Skrei con mayonesa de chipotle o un salmorejo de mango con virutas de jamón ibérico y AOVE. El ravioli de crustáceo con salsa de champagne y el carpaccio de gamba roja con perlas de amontillado y emulsión de coral son dos platos que celebran el mar y la tradición culinaria son creaciones que hay que saborear.
A la hora de decantarnos por un plato principal, en la carta de Haroma nos encontramos otras propuestas muy veraniegas, como el tartar de atún rojo con aliño cítrico, jengibre y aguacate o el tiradito de pez limón con huevas de tobiko y maíz crujiente, entre otros platos. Y los amantes de la carne pueden degustar otras cinco elaboraciones, entre las que se encuentra el steak tartar de cebón gallego con mostaza antigua o la pluma ibérica con chimichurri y puré de boniato especiado con curry y naranja.

El ravioli en salsa de crustáceo de Haroma, el restaurante del rooftop del Relais & Chateaux Heritage Madrid Hotel.
AFL
La velada, que los martes y los jueves se armoniza con música en directo, no puede terminar sin adentrarse en la carta de postres, que tiene propuestas líquidas como el gin fizz de limón y ginebra, clásicos como su torrija flambeada al Gran Marnier con helado de galleta y delicias frutales como el milhojas de crema de limón y merengue o la mousse de frambuesa y fresas con agua de rosas.
Las claves de una velada inolvidable
Cocina de temporada y proximidad firmada por un reconocido maestro de la cocina que se puede disfrutar en un rooftop tan íntimo como encantador. Acondicionada con un sistema de nebulización y parasoles que reducen la temperatura, la terraza del Relais & Chateaux Heritage Madrid Hotel es el espacio perfecto para disfrutar de una velada de verano alejada del bullicio del centro de la ciudad sin perder un ápice de sofisticación y encanto.

Una mesa del rooftop del relais & Chateaux Heritage Madrid Hotel, un lugar ideal para una velada íntima este verano.
DR
Elegante y con un servicio atento que, sin duda, eleva la experiencia, conocer Haroma es asomarse a un espacio culinario en el que el sabor y el producto son dos de los protagonistas principales. Una experiencia inolvidable que hará del puente de agosto en Madrid uno de tus momentos favoritos de este verano.