– ¿Cómo surgió la idea de producir esta colaboración?
– V: La idea surgió de una admiración mutua que fue creciendo con el tiempo. Nos veníamos siguiendo, compartiendo música, reflexiones… y en un momento, de manera súper orgánica, dijimos: che, ¿y si hacemos algo juntas? No fue algo planeado, solo surgió.
Lo más hermoso es que, aunque venimos de géneros tan distintos, hay algo que nos une desde la raíz: el Detroit. Esa ciudad no solo parió los géneros que nos representan a ambas, el techno y el house, sino que también representa una forma de romper moldes y de crear al mismo tiempo. Eso fue lo que nos atravesó. Fue como encontrar un territorio común donde podíamos jugar y experimentar. Este EP nació desde ahí, desde el deseo de cruzar nuestros universos.
-P: Me parecía muy interesante lo que podía salir entre nosotras.
Entre ambas decidimos inclinarnos para el sello detroit gallery ya que es un sello argentino que admiramos y que fusiona house y techno detroit.
– ¿Cómo fue el trabajo entre dos productoras qué vienen de géneros tan diferentes?
– V: Fue un viaje hermoso, desafiante y muy enriquecedor. En lugar de tratar de “acomodar” nuestros estilos, nos propusimos respetarlos y potenciarlos. No buscamos que una se pareciera a la otra, sino que cada una pudiera ser fiel a su esencia, y que el punto de encuentro surgiera de manera natural. Y eso hizo que el proceso se sintiera muy libre, muy verdadero.
– P: Sin perder nuestra esencia fusionamos house y techno que son diferentes géneros pero tienen muchísimo en común,el house y el techno son subgéneros de la música electrónica que comparten el uso de sintetizadores y el origen en los años 1980. Lo más importante también para nosotras es mostrar la unión que genera la música y lo que puede lograr la creatividad compartida
-V: Hubo mucho diálogo, mucha escucha. Nos compartimos referencias, sensaciones, hasta silencios. Y así, fuimos construyendo estos cuatro tracks que, para nosotras, cuentan una historia. Una historia de unión, de contraste, de complementariedad. Laburar con Pampa fue un regalo. Porque más allá del resultado final, lo que más valoro es lo que nos pasó en el camino: el vínculo que se generó, no desde la competencia, sino desde el respeto y la confianza, fue muy poderoso.
