

A Kylian Mbappé no lo expulsaban desde hacía 5 años, 11 meses y 15 días. Este domingo, el delantero francés metió un brutal planchazo que le valió la cuarta tarjeta roja de su carrera y que complicó al Real Madrid, más allá que su compatriota Eduardo Camavinga salió al rescate para darle un triunfo vital (1-0) contra el Deportivo Alavés del argentino Eduardo Coudet, que mantuvo a su equipo a cuatro puntos de diferencia del líder Barcelona, en la fecha 31 de la Liga de España. El tercero en discordia, el Atlético de Madrid de Diego Simeone y los argentinos, juega este lunes contra Valladolid.
Mbappé, máximo goleador de su equipo con 22 tantos en el torneo doméstico, llegó tarde a una pelota sobre la mitad de cancha y le aplicó los tapones en la tibia derecha de Antonio Blanco, cuando el equipo blanco ya estaba ganando por 1-0 gracias al tanto de Camavinga.
¡EXPULSADO MBAPPÉ! 🟥
⚽️ El delantero fue muy mal ante Blanco y el árbitro le sacó la roja por medio del VAR.#LaLigaEnDSPORTS pic.twitter.com/yVYu0OomCo
— DSPORTS (@DSports) April 13, 2025
El árbitro Soto Grado, raramente, le sacó primero la amarilla, pero la cambió por roja directa tras revisar las imágenes en la pantalla del VAR.
Mbappé no era expulsado desde el 27 de abril de 2019, en una final de Copa de Francia con el PSG ante el Stade Rennes, en la que recibió una roja directa en el último minuto del alargue. Tras el empate 2-2, no pudo lanzar un penal en la tanda y su equipo perdió el título (8-7).
Curiosamente, dos de las tres expulsiones que recibió como profesional, todas en las filas del PSG, se produjeron ante el mismo rival, el Stade Rennes. La primera de su carrera el 30 enero de 2018 en una semifinal de la Copa de la Liga a los 61 minutos. No afectó al triunfo del club parisino (2-3).
En la Liga francesa fue expulsado también con el París Saint-Germain, al recibir la roja directa en el minuto 90 el 1 de septiembre de 2018 en la visita al Nimes, con triunfo del PSG (2-4).
Con el Real Madrid, Mbappé había disputado 48 encuentros en su primera temporada y había recibido cuatro amarillas, tres en Liga (ante Espanyol, Girona y Real Valladolid), y una en la Liga de Campeones, frente al Atlético de Madrid.
El delantero francés será sancionado con un mínimo de un partido por juego brusco grave, que provocará su ausencia ante el Athletic Club de Bilbao en la jornada 32. Si la pena del Comité supera los tres partidos, provocaría su ausencia en la final de la Copa del Rey que el Real Madrid disputará ante el Barcelona el 26 de abril en Sevilla.
Sin un francés, apareció otro francés. En realidad, fue cuatro minutos antes de la expulsión de Mbappé que Eduardo Camavinga metió el latigazo con el que Real Madrid ganó 1-0 ante Alavés de Coudet. El mediocampista del equipo blanco no encontró oposición para rematar desde fuera del área.
Al equipo de Carlo Ancelotti, que vio el encuentro desde un palco al estar amonestado, le costó resolver la presión que preparó el Alavés.
Un chispazo le sirvió al Real Madrid para desequilibrar la balanza. En una de las posesiones más largas del partido, Camavinga recibió el balón en la frontal del área y, sin oposición, puso el esférico contra el palo derecho de Jesús Owono en el minuto 34.
La reanudación fue similar al inicio del duelo con un Alavés que quiso más que el Real Madrid, apretó y llegó a finalizar varias jugadas ante un rival que no quiso arriesgar en ataque.
Los blancos se encerraron bien y buscaron las contras del ingresado Vinicius, que forzó la expulsión de Manu Sánchez, gracias de nuevo al VAR.
En el diez contra diez, el Real Madrid estuvo mejor, cerrando espacios y llegando algo más. De hecho, Jude Bellingham tuvo la sentencia al filo del descuento tras una pérdida del Alavés, pero Owono dio una vida a los albiazules, que no acertaron.
Con este encuentro el Real Madrid se mantiene a cuatro puntos del Barcelona y el Alavés cierra la jornada con un punto por encima de la UD Las Palmas que marca la línea de los puestos de descenso.








