Sara Flamenco

Las semillas de chía son consideradas un superalimento por su poderosos nutrientes y vitaminas que aportan al organismo. Entre sus principales beneficios para la salud estan el de evitar el estreñimiento y desinflamar el abdomen, pero no son los únicos. Eso sí, es importante saber cómo consumirla.

Y es que la chía es una semilla especialmente rica en ácidos grasos omega-3 de origen vegetal, pero además los aporta junto a
ácidos grasos omega-6 en la proporción ideal para el organismo. A la vez, resulta una buena fuente de minerales como calcio, magnesio y boro. Y posee un alto contenido de fibra, tanto soluble como insoluble, clave para la saciedad y regular el tránsito intestinal.

Pero no sólo eso. Su potencial antioxidante, sus efectos beneficiosos en la diabetes, colesterol o la hipertensión y sus propiedades antiinflamatorias y laxantes, entre otras, están respaldados por la evidencia científica, según estudios que difunden en Journal of Food Science and Technology.

La forma en la que deberías comer chía si quieres aprovechar sus propiedades

Para beneficiarse al máximo de las propiedades de la chía, es necesario hidratarlas previamente antes de consumirlas. Este paso es esencial para permitir que las semillas desarrollen su sustancia gelatinosa y puedan desplazarse fácilmente a lo largo del tracto intestinal, facilitando la absorción de nutrientes y evitando posibles obstrucciones.

Lo mejor es hidratar o triturar las semillas de chía antes de su consumo. / Foto de Brenda Godinez en Unsplash.

Si no se hidratan o se trituran antes de su consumo, es probable que pasen a través del sistema digestivo sin liberar sus beneficios. En cambio, darles tiempo para formar ese gel en agua o triturarlas asegura una experiencia digestiva más suave y garantiza que obtendrás todos sus nutrientes.

Eso sí, el hecho de que se recomiende hidratarlas o triturarla
s no quiere decir que sea malo añadir semillas enteras a nuestras comidas, aunque sí menos beneficioso. Como hemos explicado, se corre el peligro de que las semillas pasen por el tracto intestinal sin liberar sus propiedades, pero no son perniciosas para el organismo.

Tres recetas con chía para desinflamar el abdomen

Batido de chía y piña

Ingredientes

Preparación

1.-

Pon las semillas de chía a remojo durante al menos dos horas (mejor si es el día anterior).

2.-

Pela la piña y corta dos rodajas en cubos.

3.-

Haz un zumo con las dos naranjas.

4.-

Pon en la licuadora la piña y el zumo y bátelo bien hasta que integre.

5.-

Añade el agua y las semillas mezclándolo bien hasta que quede una mezcla homogenea.

Yogur griego con semillas de chía

Ingredientes

  • 1/2 taza de yogur griego

  • 1 y 1/2 cucharada de semillas de chía (15 gramos)

  • Frutas al gusto (plátano, kiwi o fresa, por ejemplo)

Preparación

1.-

Tritura las semillas de chía.

2.-

Vierte el yogur griego en un bol y agrega las semillas de chía trituradas.

3.-

Incorpora las frutas que más te gusten y remueve todo con una cuchara.

Tortitas de harina y semillas de chía

Ingredientes

  • 3 tazas de harina de trigo (375 gramos)

  • 1 y 1/2 cucharada de semillas de chía (15 gramos)

  • 1/2 vaso de agua (100 ml)

  • Sal al gusto

  • 3 cucharadas de frutos secos picados (45 gramos)

  • Aceite de oliva

Preparación

1.-

Hidrata las semillas de chía en agua el día anterior.

2.-

Incorpora todos los ingredientes en un recipiente, excepto el aceite de oliva.

3.-

Mezcla todo enérgicamente hasta obtener una pasta espesa.

4.-

A continuación, cúbrela con un paño y déjala reposar 30 minutos.

5.-

Trascurrido este tiempo, dales forma a las tortitas tomando porciones pequeñas de masa.

6.-

Para terminar, rocía una sartén con aceite de oliva y cocina las tortas por ambos lados hasta que adquieran un aspecto dorado.