La Selección Argentina terminó su participación en la She Believes Cup, en Orlando, Florida, con una derrota contundente ante Estados Unidos -campeón mundial vigente- por 6-0 y cerró una experiencia muy importante para el desarrollo del fútbol femenino de nuestro país.

El equipo que conduce Carlos Borrello cayó por 4-1 ante Brasil en el debut, se le escapó el empate sobre el final ante Canadá (0-1) y este miércoles cayó ante las locales, una de las potencias mundiales.

La figura del encuentro fue la delantera Megan Rapinoe (la goleadora de pelo fucsia) que abrió el marcador y después aumentó para su doblete. Carli Lloyd, Kristie Mewis, Alex Morgan y Christen Press redondearon la goleada.

Rapinoe es ídola de las jugadoras argentinas por su calidad, por su voracidad goleadora, por su talento; pero también por haber llevado adelante el reclamo de la selección femenina de fútbol de Estados Unidos tras ganar el Mundial de Francia 2019: en su discurso, en medio de los festejos, dejó al descubierto las diferencias económicas que existen entre el equipo masculino y el femenino; y también se enfrentó con el ex presidente estadounidense Donald Trump por sus comentarios misóginos.

Rapinoe brilló en la She Believes Cup y Estados Unidos se consagró bicampeón del certamen. Y para las jugadoras argentinas fue emocionante enfrentar a las máximas figuras del fútbol femenino como la brasileña Marta, Carli Lloyd, Alex Morgan y la propia Rapinoe.

Yamila Rodríguez, figura de Boca y de la Selección, había plasmado toda su admiración hacia Rapinoe en sus redes sociales cuando logró sacarse una foto junto a la goleadora estadounidense. «Me late a mil el corazón, no puedo creer que llegué hasta ella», había publicado en su cuenta de Twitter antes del debut frente a Brasil.

A pesar de las tres derrotas, el seleccionado argentino se despidió del torneo con la satisfacción de haber competido contra las mejores y con la certeza de haber logrado una mejora en el juego y en el desarrollo de sus futbolistas de cara al futuro.