Tras el cierre de los lugares de votación en Ecuador, los primeros sondeos de boca de urna dan por ganador al candidato presidencial del correísmo, el economista Andrés Arauz, con entre casi 35% y 36,2% frente al principal referente de la derecha, el empresario Guillermo Lasso, que obtendría entre cerca de 21% y 21,7%, según las encuestadoras Cedatos y Clima Social.
De confirmarse estos datos anunciados por los medios Telesur y Ecuavisa, ninguno de los candidatos obtendría la mayoría absoluta de votos válidos, ni tampoco el 40% de los votos emitidos, con una diferencia de 10% sobre la segunda fuerza, necesarios para poder consagrar el triunfo en la primera vuelta.
Casi en paralelo y antes de que hubiera cifras oficiales, Arauz se declaró ganador en las redes sociales. «¡Ganamos! Triunfo contundente en todas las regiones de nuestro bello país. Nuestra victoria es de 2 a 1 frente al banquero. Felicitaciones al pueblo ecuatoriano por esta fiesta democrática. Esperaremos los resultados oficiales para salir a festejar», tuiteó el joven economista.
Más tarde, el titular de la CNE, José Cabrera Zurita, explicó que ya había votado el 62,34 por ciento del padrón en una jornada tranquila, aunque caracterizada por grandes colas frente a las urnas.
Campaña electoral en medio de la pandemia de coronavirus
El voto en Ecuador es obligatorio entre las personas de entre 18 y 65 años, aunque sin embargo se espera una importante cantidad de votos nulos y en blanco. La campaña electoral fue iniciada el 28 de diciembre pasado, marcada por las restricciones sanitarias ante la pandemia de coronavirus, lo que determinó que solo se realizaran actos en caravanas de autos y en plataformas virtuales.
Además de las duras imágenes de Guayaquil al principio de la pandemia, con cadáveres en las calles, se estima que más de dos millones de personas cayeron en la pobreza en los primeros tres meses del brote de coronavirus. En ese panorama, la economía es una de las principales preocupaciones de los ecuatorianos, junto con el desempleo. En septiembre pasado, en plena pandemia de Covid-19, unas 523 mil personas se encontraban sin trabajo formal, lo que redunda en uno de los peores indicadores de la historia para Ecuador.
