Sandra Pitta, la farmacéutica y biotecnóloga del CONICET que ganó notoriedad cuando en campaña el presidente Alberto Fernández le dijo que «cuidaría su trabajo», se refirió este domingo a las vacunas Sputnik V llegadas desde Rusia, señalando que «no me vacunaría jamás, porque no tengo información, todo lo que gira en torno a la Sputnik V es muy poco transparente, no hay datos, la bibliografía es escasísima, creo que el presidente Alberto Fernández no tiene noción de lo que está haciendo…».

«El Presidente tiene a su alrededor personas expertas, y todo esto que estoy contando, en torno a la escasa información sobre la vacuna rusa lo saben absolutamente bien, así que o no se lo están transmitiendo bien, o él no lo entiende, no entiende la gravedad de la situación», consideró Pitta, destacando que «la vacuna Sputnik V que como la de AstraZeneca está basada en vectores virales, en adenovirus, y hay muchos estudios hechos sobre vacunas con adenovirus, muchos han fracasado, algunas han tenido algún éxito, pero hay un efecto adverso que se nota en muchas de estas vacunas, que es trombosis venosa profunda en personas que reciben la vacuna».

«Eso puede o no ocurrir, por supuesto, pero si ese efecto adverso no se ha detectado o se ha detectado y no se está diciendo, personas con coagulopatías no deberían recibirla», agregó Pitta en diálogo con Gonzalo Aziz en Aire de Noticias, por Radio Mitre.

El gobierno ruso autorizó la vacuna Sputnik V para mayores de 60 años

«¿Quisiera saber dónde están las contraindicaciones de la vacuna Sputnik V? Porque la vacuna de Pfizer ya se ha observado que determinadas personas con determinadas alergias no pueden recibirla, entonces que hacen los estados, deciden que no se le aplique a ninguna persona con alergia por las dudas hasta que veamos bien cuál es el componente que está provocando esa reacción alérgica en personas propensas. Pero acá con la vacuna rusa no hay ningún tipo de contraindicación, entonces ¿qué pasó? ¿No hubo nada, no hubo ningún efecto adverso? Es muy raro eso…».

Sobre la aprobación de la ANMAT que autorizó la aplicación de la vacuna rusa en el país, Pitta opinó que «el prestigio que tiene el Centro Gamaleya acá no sirve de guía, hay que basarse en evidencias, los científicos eso es lo que hacemos, no importa si una vacuna viene de ahí, de Pfizer o de otro lado, te digo más, la de Pfizer era elaborada por dos científicos de origen turco en Alemania, científicos inmigrantes de una empresita chiquita que se asoció a Pfizer, así que eso del prestigio es un argumento que tiene su peso, pero los científicos no lo usamos, no es el argumento principal».

«Hay muchísimos científicos que piensan como yo, por privado decimos todo esto es una locura, pero después ya se confunden con ideologías», señaló Pitta, considerando que «salvo los que son muy fanáticos del kirchnerismo, los otros dicen ‘esto no es un método científico'».

«Gabriel Rubinstein dice en una nota de Clarín que la ANMAT aprobó de una forma extraña la vacuna rusa, porque no hubo una disposición. «Te dice esto se aprobó, como hizo con Pfizer, pero acá cn la Sputnik V no hubo una disposición, hubo una resolución del Ministerio de Salud que dijo ‘ANMAT la recomendó’ y hay una carta que se hizo pública la recomienda, pero sin datos…», indicó Pitta.

«Creo que ANMAT debe tener esos datos, porque para recomendar algo tenés necesitás datos científicos, necesitás evidencias, pero me gustaría que alguien de ANMAT saliera a decir que tienen esos documentos, así los podemos evaluar. Acá no se trata el país, yo la rechazaría también si viniera de Estados Unidos sin evidencias, pero pasar todo por el tamiz ideológico es un enorme error y también una trampa en la que quieren que caigamos», concluyó Pitta.

HB