Nunca antes se habían colocado este tipo de obligaciones con un tipo de interés negativo.
El Tesoro Público de España ha emitido este jueves 1.403 millones de euros de deuda pública en una nueva subasta de bonos y obligaciones, y lo ha hecho cobrando por primera vez a los inversores por el bono a 10 años.
El país ibérico ha colocado 921 millones de euros en una obligación a 10 años, con un interés marginal del -0,016 %, lo que supone la primera rentabilidad negativa de esta referencia de toda su historia.
En la anterior subasta el Tesoro español había establecido para estos bonos un interés de colocación del 0,23 %.

De esta manera, la rentabilidad de la deuda pública española se asimila a la de los países de su entorno: Portugal también presenta desde este miércoles un interés de colocación negativo, del -0,027 % de rentabilidad, mientras que Francia sitúa el suyo en un -0,36 %.
Según lo previsto en el recién aprobado proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado de 2021, el Tesoro Público registrará a lo largo del próximo año una emisión bruta de 299.138 millones de euros, lo que supone un aumento del 6 % con respecto al ejercicio anterior y un nuevo récord en sus registros históricos.