Después de perderse dos partidos por una molestia en su rodilla derecha, Facundo Campazzo volvió a jugar en la NBA. Y lo hizo aportando su clásica energía en la defensa y sumando su liderazgo con la pelota cuando le tocó ingresar en el triunfo de Denver, que tras tres derrotas consecutivas superó a los Cleveland Cavaliers por un contundente 133-95.

Antes de confirmarse su presencia, el entrenador de los Nuggets Michael Malone anticipó la necesidad de volver a contar con el base argentino. Sobre todo por su participación en la defensa de un equipo que, justamente, sufrió en ese costado de la cancha en los últimos encuentros. “Facu es intenso, se mete adentro tuyo, te irrita. Necesitamos eso de regreso, hoy en defensa no estamos irritando a nadie”, dijo el coach.

Con esa premisa, Campazzo ingresó en el cierre del primer parcial que Denver ganó por 17 puntos de diferencia (34-17). Pero fue en el comienzo del segundo parcial donde el base protagonizó una jugada que confirmó las palabras de su entrenador: en una acción defensiva, el argentino se anticipó a la rotación de balón de Cleveland y le propinó una espectacular tapa a Dylan Windler.

Campazzo firmó su regreso con cinco puntos, tres asistencias, dos robos y una tapa en los 14 minutos que pisó el parquet del Ball Arena, la casa de los Nuggets. A pesar de su bajo porcentaje en tiros de campo (2-6), fue energía cuando ingresó, sobre todo en la defensa, fue vital para que Denver logre su victoria número 13 de la temporada en la que tiene 11 derrotas.

Fuente: Infobae