Anthony Joshua perdió a dos amigos cercanos en el accidente automovilístico que sufrió el lunes en Nigeria. La promotora Matchroom, que representa al boxeador británico, confirmó que las dos personas que fallecieron como consecuencia del choque fueron Sina Ghami y Latif Ayodele, que formaban además parte del equipo de trabajo del ex campeón mundial de peso pesado.

En el comunicado, la empresa explicó también que Joshua, de 36 años, «sufrió varias heridas y fue llevado al hospital para revisiones y tratamientos» y que estaba «en condición estable y permanecerá allí en observación».

El accidente ocurrió cuando el Jeep Lexus en el que viajaba el boxeador junto a otras tres personas chocó contra un camión estacionado en la autopista que conecta Ibadan, la capital del estado de Oyo, con Lagos, la ciudad más grande de Nigeria.

El comunicado del portavoz del Cuerpo Federal de Seguridad Vial, Olusegun Ogungbemide, explicó que las investigaciones preliminares indican que el vehículo «viajaba más allá del límite de velocidad legalmente prescrito, perdió el control durante una maniobra de adelantamiento y chocó contra el camión». De acuerdo al medio Punch News, Joshua iba sentado detrás del conductor y el pasajero que iba al lado del conductor y el que iba al lado del boxeador murieron en el acto.

«Con profunda tristeza, se ha confirmado que dos amigos íntimos de Joshua y miembros de su equipo, Sina Ghami y Latif Ayodele, han muerto de forma trágica», informó Matchroom a través de las redes.

Cofundador de Evolve Gym, una cadena de gimnasios de Londres, Ghami se dedicaba a la rehabilitación física especializada en lesiones musculoesqueléticas y ejercicios correctivos. Desde hacía más de una década era preparador físico de Joshua, a quien ayudó de cara a algunos de los combates más importantes de su carrera, incluida la pelea por el título contra Wladimir Klitschko en 2017 y la victoria de hace algo más de una semana ante el youtuber estadounidense Jake Paul en Miami.

Además de formar parte del equipo del británico, trabajó con atletas de renombre como el retirado corredor de los Pittsburgh y Tampa de la NFL, Le’Veon Bell; Draymond Green, ala pivot de los Golden State Warriors de la NBA; y otras figuras del fútbol americano, la liga de básquetbol estadounidense y la MLB. Y también con el equipo de fútbol americano de la Universidad Estatal de Michigan.

Ayodele, apodado Healthy Mindset (Mentalidad Saludable) por su filosofía de vida y su forma física, era amigo íntimo y entrenador personal de Joshua, a quien conocía desde antes de que el británico ganara su primer título mundial, en abril de 2016.

Ex futbolista -jugó de manera semiprofesional en varios equipos británicos como Aylesbury United y Northwood-, trabajaba estrechamente con Joshua en su forma física, acondicionamiento y preparación para los grandes combates. Y también había entrenado a deportistas de primer nivel, como Cristiano Ronaldo, Zlatan Ibrahimovic y David Beckham, y el ex All Black Sonny Bill Williams, bicampeón del mundo con Nueva Zelanda en 2011 y 2015, quien le rindió homenaje en sus redes sociales.

Ayodele había cambiado su nombre de Kevin a Latif tras convertirse al Islam en 2012.

De acuerdo a un experto de la BBC, Ghami y Ayodele eran partes «extremadamente importantes de la máquina Anthony Joshua» y lo acompañaban todo el tiempo. El boxeador británico los llamaba «my boys» (mis muchachos).

El británico, que fue campeón olímpico en Londres 2012 antes de arrancar su carrera profesional, había llegado a Nigeria el domingo para visitar familiares que viven en Sagamu, una localidad ubicada al suroeste del país. Y también para descansar, luego del combate ante Paul en Miami, donde logró ganar por nocaut técnico en el sexto asalto, dejando al estadounidense con una doble fractura en el maxilar inferior.