
La instalación de seis letreros en que advertían que una playa mexicana era «área restringida» por EE.UU. ha levantado una gran polémica, en medio de la tensión que enmarca la relación bilateral desde que Donald Trump asumió por segunda vez su mandato.
«Peligro. Área restringida. Esta propiedad del Departamento de Defensa ha sido declarada área restringida por las autoridades de acuerdo por autoridad del comandante (…) Se prohibe la entrada no autorizada. Todas las personas que ingresen pueden ser detenidas y registradas», señalaban los carteles escritos en inglés y en español. Aparentemente, personal no identificado de EE.UU. los instaló en Playa Bagdad, ubicada en el estado de Tamaulipas, fronterizo con Texas.
También prohibían tomar fotografías o hacer anotaciones, dibujos, mapas o representaciones gráficas del área o de sus actividades, y amenazaban con que todo ese material sería confiscado.
🚨 Incidente en Playa Bagdad, MatamorosPescadores denunciaron que presuntos militares o personal de EE.UU. cruzaron el Río Bravo en lancha y colocaron 6 letreros de “Área Restringida del Departamento de Defensa”.La Marina mexicana los retiró de inmediato y restableció el… pic.twitter.com/v8ai7eKNCO
— Azteca (@MORRIS80766176) November 18, 2025
Playa Bagdad se recuesta en el Golfo de México (que Trump bautizó de manera unilateral como ‘Golfo de América’), justo en la zona en donde este año cayeron restos de naves de SpaceX, propiedad de Elon Musk. El incidente ha provocado frecuentes reclamos de ambientalistas por el daño causado al ecosistema marino y por su operación irregular en aguas mexicanas.
Luego de denuncias de los pobladores, las secretarías de Marina y de Relaciones Exteriores de México retiraron los letreros y reconocieron que su instalación generó dudas respecto a su procedencia y por qué fueron instalados en un territorio nacional ajeno.
Explicaciones pendientes
«Durante las primeras consultas realizadas por el Consulado de México en Brownsville no se identificó confirmación de que los señalamientos hubieran sido colocados por alguna autoridad estadounidense», explicaron en un comunicado en el que revelaron que ya habían solicitado información sobre lo ocurrido en la embajada de EE.UU. en México.
Además, anunciaron que la Sección Mexicana de la Comisión Internacional de Límites y Aguas «iniciará las consultas técnicas necesarias para esclarecer cabalmente el incidente, así como realizar la revisión que establecen los tratados vigentes de límites y aguas de los mapas e instrumentos que delimitan la frontera entre ambos países».
El martes, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, explicó que, en un principio, no existió ningún reporte de que los letreros hubieran sido oficiales ni colocados por autoridades estadounidenses.
No obstante, precisó la mandataria, un área del Gobierno de EE.UU. reconoció que sí había contratado a una empresa para poner los avisos, por lo que México los retiró y recordó cuál era el límite territorial. Hasta ahora no se sabe de qué dependencia estadounidense se trató.

Polémica
Los letreros provocaron una controversia, ya que usuarios de redes sociales aseguraron que Musk quiere controlar la zona para continuar operando de manera irregular con SpaceX o que se trata de una muestra más de la manera en que Trump quiere «invadir» a México.
«SpaceX quiere controlar 400 km cuadrados de nuestras aguas nacionales para tirar desechos de los cohetes que lanza. El 5 de noviembre se hizo un barrido con apoyo de la Universidad de Tamaulipas y se encontraron grandes daños al suelo marino por los propulsores que cayeron ahí y la plataforma que usaron para sacarlos. Somos su basurero y no quieren que los investiguemos«, aseguró el influencer Ignacio Rodríguez.
«Se han querido apropiar de Playa Bagdad en México. Así mismo pasa en otra regiones de México (donde) estadounidenses reclaman territorios enteros de playas mexicanas en su favor. La invasión a México está siendo de manera lenta pero continua«, acusó otro usuario.








