Federico Gómez se convirtió en el único argentino en ingresar al cuadro principal del US Open desde la qualy. Para lograrlo, el bonaerense de 28 años, número 206 del ranking ATP, debió superar un durísimo obstáculo en la última ronda: el francés Hugo Grenier (188), con quien no solo batalló dentro de la cancha, sino también en un explosivo cruce cara a cara que dejó una escena cargada de tensión.

El nacido en Merlo terminó festejando con parciales de 6-7 (5), 7-6 (5) y 6-2, después de remontar un partido que parecía perdido: llegó a estar set abajo y 0-4 en el segundo parcial antes de reaccionar con carácter y garra.

Justamente, el altercado con Grenier se desató al final de ese segundo set. Gómez lo celebró con un grito desaforado que irritó al francés.

En el cruce hacia las sillas, el europeo le recriminó el festejo y se desató una discusión caliente, a los gritos y con gestos ampulosos.

Cuando Grenier se alejó hacia su sector, Gómez lo siguió todavía exaltado, señalando hacia la tribuna donde estaba el equipo del rival. La tensión escaló al punto de que la jueza tuvo que bajarse de su silla para intervenir y calmar los ánimos.

Minutos después, Gómez explicó lo sucedido y reveló que desde la zona del box de Grenier lo habían insultado. «Me prendí por un par de cosas que me dijeron de afuera, que la verdad no son lindas de decir», señaló. Y remató con una chicana futbolera que dejó su sello en Nueva York: «La verdad que me enfoqué en ganar y… segundo, Francia».

Gómez participará por primera vez en el último Grand Slam de la temporada, que comenzará este domingo en Flushing Meadows. Sera al día siguiente, el lunes, cuando enfrente al británico Jack Draper, quinto favorito.